Paseo por el muelle...vistas a la Bahía de Santander

Te recomendamos que no te vayas de Santander sin que te hayas dado un Paseo por el muelle, desde la Grúa de Piedra hasta que te encuentres con Los Raqueros, o con José Hierro. La vista desde aquí cambia cada día. Y nunca es igual: de día, de noche, con marea alta, con marea baja, con lluvia, con viento, con sol,...

Como escribe Mario Crespo en la publicación Santander en boga: “Algo tiene la bahía para que el ciudadano regrese siempre a ella como un pequeño refugio frente a los afanes diarios. Este lugar nos ha convertido a los santanderinos en - habitantes del privilegio- . Del privilegio que supone la contemplación y la cercanía de este mar deformado en bahía.

 Cualquiera puede intuir la gran relación que Santander ha tenido y tiene con este mar al que la ciudad ha ido comiendo espacio en sucesivos ensanches desde finales del siglo XIX. La presencia constante de cargueros que se dirigen al puerto o salen de él, el ferry que llega dos veces por semana, los pequeños pesqueros, las lanchas pedreñeras que unen las dos orillas de la bahía o los botes y yates particulares ….”